Corría el año de 2012 cuando el Sr. Eduardo Gabriel Néquix Jiménez y la Sra. Gabriela Franco Barco,
ciudadanos mexicanos residentes del Estado de México, decidieron emprender un pequeño negocio, más por urgencia
que por visión y más por extrema necesidad que por gusto. Agobiados por una enfermedad que se le fue diagnosticada
en 2011 al Sr. Gabriel, las circunstancias en la familia cambiaron drásticamente; el Sr. Gabriel en el año en que
se le fue dado a conocer su diagnóstico se vio obligado a dejar su empleo en una reconocida financiera en
la que había estado empleado por ya varios años. Dicha enfermedad le impedía trabajar formalmente y puso a la
familia en una situación económica muy complicada y difícil. La Sra. Gaby tenía un trabajo en una empresa de embutidos,
desempeñándose como vendedora de mostrador en tiendas de autoservicio, en el año ya dicho antes, pero era empleada
solamente de fin de semana y el salario era muy bajo, aunque las prestaciones que recibía eran considerables,
por tal situación se vieron en la necesidad de buscar un medio de subsistencia que les permitiera hacer frente a
los grandes desafíos y compromisos que traía consigo la enfermedad y las necesidades que toda familia tiene que enfrentar.
Un día, viendo la necesidad que se suscitaba en ellos, alguien sugirió que intentaran vender algo para que pudieran obtener
los recursos necesarios; entonces pensando y dando vueltas a las posibilidades que existían, se decidieron entre otras opciones
por vender donas; aunque cabe señalar que no tenían ni la menor ides de cómo se hacían. Alentados por su necesidad se entusiasmaron
e invirtieron el poco capital que tenían en las materias primas necesarias para poder elaborarlas, y así, al día siguiente
se encontraban elaborando en el horno de la estufa, la primera producción de donas para venta al público. Como ya habíamos enfatizado
antes, ninguno de los dos tenía noción de lo que era elaborar pan o productos derivados, por lo que la falta de experiencia los llevó
a producir unas donas que lejos de parecer pan, parecían piedras. Estaban tan duras que más bien parecían galletas en lugar de donas.
Afortunadamente por la consideración y piedad de la familia y amigos a quienes se les ofrecieron, no tuvieron que sufrir la merma
de aquella producción fallida y pudieron invertir nuevamente en las materias primas para volver a intentarlo, esta vez, el Sr, Gabriel
tuvo que investigar y aprender cómo era real y correctamente la elaboración de la masa para poder elaborar un producto que
fuera atractivo y sabroso para quien lo consumiera, afortunadamente para ellos, la siguiente producción de donas fue muy diferente
a la primera y ahí fue donde comenzó todo, se vendían mini donas que eran empaquetadas por medias docenas en una bolsa de
papel celofán y atadas con un listón plástico muy llamativo y que les daba una apariencia muy apetecible. Gracias a la facilidad
para vender con el que cuenta la Sra. Gaby y con la formación como vendedora que tuvo en la empresa donde era empleada,
las donitas eran vendidas por completo en cada producción y eso era alentador, aunque por la cantidad que se elaboraba y por
los muchos gastos que se tenían por las circunstancias que prevalecían, era muy difícil que el pequeño negocio creciera.
Dado que un solo producto no puede sostener un negocio por mucho tiempo, tiempo después, en el año 2012 y con la necesidad de crecer, el Sr. Gabriel comenzó a tomar cursos de repostería por internet y poco a poco fue aprendiendo algunas cosas que le ayudaron a añadir otro producto a su raquítico catálogo de productos, entonces se añadieron las galletas de pasta seca de mantequilla, (muy conocidas y estimadas en esa región donde residen), a la producción y venta. La presentación era la misma que las minidonas, pero éstas se empaquetaban por docena en cada bolsa, con estos dos productos apenas se daba para subsistir dada la condición de la familia, ya que la Sra. Gaby tuvo que dejar su empleo también en 2012 para dedicarse a la venta y distribución de la pequeña producción.
Ese fue el primer año del pequeño (2011/2012) emprendimiento donde las pequeñas utilidades eran consumidas en la subsistencia de la familia y los medicamentos para el tratamiento de la enfermedad del Sr, Gabriel, misma que impedía que la producción fuera más abundante y así poder crecer. En el siguiente año (2013 y 2014) se añadieron a la lista de productos, panqués de tamaño familiar en diferentes sabores: de nuez, vainilla, naranja, chocolate; rellenos con nueces, pasas, chips de chocolate, almendras, arándanos, etc. Dichos panqués eran empaquetados con un disco de cartón y envueltos con plástico film para su venta. Cabe mencionar que para estas alturas se tuvo que invertir en un horno más grande para cubrir la demanda de producción, así mismo un tanque de gas estacionario y una batidora que simplificara la elaboración de los productos.
Dos años más adelante (2016) se incorporaron al catálogo gelatinas individuales de mosaico y en otras muchas variedades; de agua, de leche, con frutas frescas y también gelatinas de tamaño familiar. Tiempo después, a finals del 2016, tratando de tener una presentación más sofisticada y atractiva, se cambiaron los empaques de los productos; la producción ahora se empaca en domos plásticos que mejoran su presentación y su preservación. Se creó el logotipo y el eslogan del negocio para darle identidad. El negocio tomo identidad con el nombre de: “Repostería Gaby” …un delicioso momento de felicidad…!!! Se implementaron las etiquetas en los empaques y se integró la entrega a domicilio, ya que nunca han contado con un local físico para venta al público. Paulatinamente, en los isguientes años (2017/2020) el catálogo de productos fue creciendo y se añadieron otros muchos productos como tartas, carlottas, pay’s, pasteles, pan de muerto, roscas de reyes y postres individuales de muse de diferentes sabores.
Actualmente las minidonas y las galletas de mantequilla están descontinuadas, pero todos los demás productos prevalecen y el catálogo es más amplio y se tiene la idea de adquirir un medio de transporte que facilite la entrega a domicilio y haga más ágil la venta.